EL ÁTICO DEL PÁNICO: EL BAILE DE GRADUACION

Aquella noche tranquila, decidí que la fiesta había terminado para mí, pues el cansancio empezaba a menguar en mis movimientos, pues aunque no había bebido mucho, el trabajo en el hospital era duro y mi mente solo deseaba descansar...
Mi nombre no es muy importante, pero soy doctor en un hospital en el área conurbarda de Nueva York, EUA, aunque de origen latino, mi vida entera la he vivido en este país, aunque extraño mi hermoso México, y después de lo que me pasó pues más aún...

Como mencioné anteriormente estaba en una fiesta a la cual mis amigos me insistieron en ir pues a mi no me agradan mucho las fiestas de universitarios, cerveza, drogas y pláticas estúpidas, ¡Pero las chicas! me decía mi compañero de cuarto, y en verdad las hormonas, me aceleró el pensamiento, y me dije ¡Pues tal vez este sea tu día amigo! y conozcas a la chica de tu vida.

Así que accedí, un ratón de laboratorio como lo era yo, bueno así me decían casi todos, fui a la fiesta que tenía un particular estilo country, me fui con botas y sombrero, me sentía ridículo, ya se imaginaran un nerd con esta vestimenta, era de risa, pero me daba igual.

Llegué y como lo pensé había muy pocas chicas en el lugar, y muchos tipos mal encarados y medio borrachos, así que me dije solo un rato y a dormir al departamento, estuve conversando con una chica y me dijo que estaba muy aburrida, pero que no se quería ir con su amiga, pues estaba ebria, y le dije que si quería yo la llevaba, al fin y al cabo no accedió, no era su tipo me contestó...

Ni modo, solo la iba a llevar, y si había oportunidad, bueno pero no la hubo!, será en otra ocasión, aburrido y decepcionado decidí regresar a mi dormitorio para ir a abrazar a una de mis almohadas, les avisé a mis amigos que ya estaban con ebriedad completa, les pedí que se quedaran a dormir allí y no manejaran, y me retiré, serían cerca de las 11:40 de la noche, para mi era muy tarde, así que subía al auto, y arranque sin más.

Mi auto, mi mayor éxito, un Mustang 65 descapotable, color blanco y asientos de piel color marrón, era casi como un amigo para mí, así que andamos unos 20 minutos por una avenida que conecta Baltimore (donde fue la fiesta universitaria) con Nueva York donde se encontraba mi hogar...

Con música suave, era algo de los 70´s, y a una velocidad moderada, vi como a unos 100 metros a una chica en el acotamiento de la carretera, me hizo el autoestop, y me detuve sin pensarlo dos veces, me pareció un lugar y hora inapropiadas para una chica tan linda como ella...

Subió al asiento trasero del auto, pues traía algunas cosas en el del copiloto, y me pareció extraño pues vestía un vestido negro de noche, algo sucio y maltratado, pensé en que le hubiera pasado algo malo, así que me puse a platicar con ella, me comentó que venía de su baile de graduación y que sus amigos la habían dejado en ese lugar y me pidió que la llevara a su casa, lloró un poco y la consolé diciéndole que pronto estaríamos en su casa que no se preocupara...

Llegamos a un hacienda algo retirada de mi departamento, pero lo valía la chica era tan linda, y pensé que después, habría la posibilidad de invitarla a salir, me bajé inmediatamente y le abrí la puerta, ella me agradeció, me abrazó con fuerza y me dio un beso en la boca, sentí frío!, y ella corrió hasta llegar a la entrada principal de su casa, me dijo adiós con su mano y un beso me envío, quede prendado de ella...

Una mujer tan linda, y tan noche en pleno freeway, que extraño! me repetía esto durante todo el resto del viaje de regreso, me dolió desprenderme de ella y tan solo había cruzado unas cuantas palabras con ella...

Cuando llegué y bajé del auto, al recoger mi maletín del asiento trasero me percaté que a ella se le había quedado su bolso, que por ser muy pequeño ni cuenta me dí cuando lo dejó. ¡Gracias Dios mío! -me dije- una oportunidad más de verla, soñé con ella...

Al día siguiente me levanté temprano para ir hasta su casa, y entregarle su bolso, pero principalmente volverla a ver e invitarla a la siguiente fiesta de la universidad, llegué y toqué a la puerta, después de 6 toques un hombre canoso y arrugado abrió -Perdone señor, pero buscó a una señorita que ayer le dí un raid en la noche, pues dejó su bolso en mi auto- El señor bajó la cabeza y me hizo pasar, me dijo: -Amigo, ella es la señorita que usted conoció- me preguntó enseñándome una fotografía de ella, ¡se veía hermosa!, le contesté sí! ella es!, lo siento amigo, pero ella falleció hace dos años precisamente donde usted la levantó, ya sucedió antes! así que ayer fue su segundo aniversario de que tuvo un accidente con sus amigos después de su baile de graduación y ellos la dejaron moribunda en ese lugar y allí terminaron sus días...

Me quedé petrificado, pues no creí del todo la historia del anciano y menos lo que le habían hecho y entonces el señor sacó un vestido negro de noche sucio y maltratado y me dijo este es el vestido que ella llevaba esa noche, y era el mismo que ella llevaba anoche...

Y sus amigos ¿Qué pasó con ellos? y él me respondió que hace un año habían fallecido casi todos en un accidente automovilístico, en el mismo lugar donde falleció mi hija después de una fiesta, solo sobrevivió la mejor amiga de mi hija, pero enloqueció y ahora esta internada, solo atina a decir que mi hija los ¡Había matado!, ¡Que ella estaba viva! ¿usted cree?

Salí horrorizado pues aquella chica se había vengado de ellos, y a mí me había dado un beso, ahora se porque sentí frío, desgraciadamente me enamoré de una mujer muerta..

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